viernes, marzo 24, 2017

La Unión Europea

Con dos Guerras Mundiales Europa se devastó.
La Primera empezó en Julio, con muchísimo calor.
El 28 de Julio de 1914 fue el comienzo del horror.
Seguramente fue el calor lo que a los locos no ayudó.

El 11 de Noviembre de 1918 la Primera terminó,
el hambre y el frío con las fuerzas acabó.
Y a los felices años 20 el mundo se dedicó.
Aunque también con el dinero mucho se especuló.

Tanto se especuló que la sociedad de nuevo enloqueció.
Y el consumo de nuevas drogas también ayudó.
Heroína y Cocaína fueron chicas de la perdida generación.
Y otras drogas con las que mucho se alucinó.

Las drogas seguramente en gente importante melló.
Por un lado la bolsa de Nueva York en el 29 cayó,
y por otra, tanta debilidad mental a la guerra nos llevó.
En los felices años 20 la locura se desarrolló...

En Alemania el Nazismo poco a poco se forjó.
El resentimiento del perdedor en soberbio le convirtió. (perdió en la 1ª Guerra Mundial)
Alemania Gran Nación tenía que ser por su honor.
Y con la Alemania Nazi la Segunda Guerra comenzó.

El cristiano protestante siempre más puro se creyó.
Y ahora esa percepción en ideología Nazi se transformó.
No cabía la misericordia ni la humildad por Dios.
Había que luchar para conseguir la purificación.

Y el 1 de Septiembre del 39 la Segunda Guerra empezó.
Alemania tenía que eliminar a los que no encajaran en su patrón.
Justificado por Hitler, la nación alemana era la más pura y mejor.
El más puro patrón humano de toda la creación.

Alemania en Polonia comenzó su invasión,
y Europa en otro conflicto bélico se convirtió.
Y las drogas, en el fondo, alargaron la situación.
Soldados con músculos fuertes y débil interior.

Al alma y a Dios totalmente a un lado se le dejó.

Seis años pasaron y la Segunda Guerra terminó.
En el 7 de Mayo de 1945 se fechó.
Y en Europa sólo había devastación.
Y muchos odios y rencores, mucho dolor.

La historia de Europa hasta entonces era un horror.
Y los pesimistas pensaron que no tenía solución.
Pero unos cuantos optimistas dijeron, "¿y por qué no?".
¡Ya estaban hartos de tantísimo dolor!

En la unión europea el optimismo pensó.
Y en 1951 la primera Asamblea Parlamentaria se constituyó.
6 países, enfrentados en la guerra, mostraron su colaboración.
En conseguir objetivos comunes que impidieran la destrucción.

Junio de 1955, una conferencia en Mesina se celebró.
Gracias a los optimistas la total integración se decidió.
Una Europa comunitaria que permitiera la construcción.
Allí empezó a crearse el tratado de la total integración.

El pesimismo en el espíritu de Mesina por supuesto no creyó.
Y en el grupo optimista el Tratado se creó.
Hasta entonces sólo la CECA proyectaba algo de unión.
Con el Carbón y el Acero, para distribuirlos mejor.

Dos años tardaron en redactar un tratado de Integración.
El 25 de marzo del 57, en Roma, el tratado se firmó.
El "Tratado de Roma" fue su denominación,
y el espacio europeo en la Unión Europea se edificó.

Se establece así en Europa un acuerdo de Pacificación.
Queriendo ser fiel a sus fuentes y valores de construcción.
Defendiendo los derechos humanos y la estabilización.
Una Europa caracterizada por la diversidad y la integración.

Desde entonces hasta ahora el tratado mejoró.
Se han firmado otros tantos que al primero superó.
Y en Europa ya han pasado 60 años de Unión.
Aunque sigue el pesimismo mostrando su desaprobación.

Digo yo que serán los que a Europa no quieren de corazón.
Pues nunca fue Europa tan pacífica, rica, intelectual y con ánimo de colaboración.
Hasta es líder en cooperación al desarrollo en otros países que no son de la Unión.
Con la libre circulación se mezcla la diversidad y se afianza en integración.

El pesimismo dice que la Unión Monetaria fue la que más daño nos causó.
La verdad es que la ciudadanía sí que inmadura se comportó.
Mucho nos debimos haber quejado cuando en su día el café subió.
Pero se sufría un estado de shock, y las cuentas eran un follón.

En definidas cuentas, la hostelería se aprovechó.
Más de la mitad subió el café en cuanto el euro llegó.
En los salarios, en cambio, se produjo un parón.
Y desde entonces hasta ahora comenzó la inflación.

Cara está la vida en la España de la Unión.
Que se abarate la vida le piden muchos a Dios.
O que se suban los salarios en un porcentaje mayor.
En España se echa de menos la moneda de la nación.

Pero a pesar de todo yo quiero la integración.
Quiero ser una optimista de mi generación.
Quiero Paz y Alegría en Europa para siempre por favor.
Y celebrar el Tratado de Roma dando gracias a Dios.


(actualizado el 27/03/17)
(actualizado el 29/03/17)

3 comentarios:

  1. Yo también soy optimista
    Si me pides mi opinión
    Es más, ¿qué más diría?
    Que me gustas un montón

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  2. Me ha gustado, Lucía, y además un buen resumen histórico.
    Un beso

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